
Estudiando en España: Primer día de clases en el Master
Veo por la ventana y me doy cuenta que no llovió como dijo el app del tiempo de mi iPhone, primera vez que veo que falla (qué extraño); sin embargo, lo que no falló fue el impacto que generó en mi la frase
“Yo quería jugar en la Champions”…
A diferencia de otros institutos o universidades, mi primer día de clases tuvo dos días de introducción, el primero con todos los integrantes de los Masters y el segundo con los que estudian conmigo este año (Master en E-Commerce y Marketing Digital).
Estuve rodeada de chicas y chicos de España, México, Chile, Colombia, Venezuela, Perú y otras partes de Europa. El primer día se presentó un ex alumno, Ricard Garriga, no me olvidaré ese nombre.
Ricard contó todo lo que pasó desde que decidió estudiar el Master, que en algún momento sintió que llegó a su techo y que si bien era bueno en lo que hacía, sentía que le faltaba aprender algo más.
Fue justo al terminar cuando le salió una oportunidad para trabajar fuera y como él mismo dijo “En España no lo ataba nada” como para no hacerlo (esa frase en algún momento también la he pensado así que desde ahí le presté mucha más atención de la que ya le había puesto desde que llegó vistiendo súper casual a exponer).
Se dio cuenta de que si bien jugaba LA Liga y que su equipo estaba en primera, que habían ganado campeonatos y eran muy buenos, él quería jugar en la Champions y que para lograrlo tenía que arriesgar.
Sabiendo también que podía perder pero contó que hubiera perdido más si dejaba pasar esa oportunidad. En USA trabajó algunos años hasta que decidió volver y poner su propia empresa en Menorca y que luego de todo eso podía darnos 6 palabras para la vida profesional y personal (para mi en ese momento estaba hablando Gareca).
¿Cómo empezamos a jugar en la Champions?
- Aprendizaje Constante: ¡Ajá! No solo no dejar de estudiar si no buscar el estar actualizados en lo que más nos apasiona hacer.
- Actitud: Para creernos que sí podemos hacer lo que tal vez otros no se atreven o no lo creen posible. (Él se fue a USA recontra joven a tocar puertas de empresas grandes, vistiendo terno, dándose cuenta ahí que la actitud no te la daba la ropa sino tú mismo).
- Humildad: ¡Esta palabra me encanta! Porque comparto que así llegues a la cima nunca debes olvidar dónde y cómo empezaste pero sobre todo ser agradecido con todo lo que pasó antes para llegar a ese momento o a ese lugar.
- Pensar en grande: No dejar de visionar que más podríamos hacer, observando y evaluando también claro.
- Pasión: “Sin pasión no hacemos nada tíos” amé cómo lo dijo.
Como verán me gustó mucho escucharlo y si pues, debemos disfrutar el trayecto o el camino que nos toque a cada uno para ir creciendo, pues como él mencionó este debe ser “bonito, divertido y extremadamente profesional”.
¿Qué pasó cuando terminó de contar su experiencia? Pues lo aplaudí mucho, yo sentía que me habían traído a Messi y ya que no me atreví a gritar que lo amaba misma fan enamorada lo empecé a seguir en todas sus redes sociales #LaStalker, ese día salí súper motivada de clases
El día que fui parte de un Casteller
Al día siguiente pensé que la experiencia sería similar pero no, el director de los Masters de Gestión (donde pertenece mi Master) presentó al jefe de la escuela de “Castellers de Vilafranca” para que nos cuente cómo gerenciaba y dirigía su empresa.
Hasta ahí, pensé que nos contaría su experiencia, pero al rato hizo entrar a varios integrantes de su equipo con todo e instrumentos (para esto yo no sabía mucho sobre los Castellers, solo sabía que era una tradición de torres humanas en Catalunya y nada más).
Entonces dije, ¡Ah! Todos nos contarán su experiencia, la verdad demoré en captar lo que iba a pasar (ayyy).
Y fue ahí cuando nos dividieron en cuatro grupos diferentes para formar castillos de 1 y 3 pisos, como nadie se movía de sus sitios, nos dijeron que de verdad lo íbamos a hacer y que por eso habían pedido que vayamos en zapatillas y con ropa cómoda ¿Era en serio?
¿Iba a ser parte de un casteller? ¡No podía creerlo! A lo mucho aspiraba a verlos en acción durante el mes de su festividad y ya, pero ahí estaba nerviosa y emocionada, trataba de disimular para que no se den cuenta pero vi que varios estaban igual que yo así que todo fluyó mejor.
Como nos quitaron los celulares, no pude grabar ni tomar foto de las torres, se supone que nos pasarían las fotos pero aún no las he visto, lo que sí puedo contarles es que fue más que emocionante saber y vivir cómo se preparaban, cómo cada uno ayudaba a vestirse al otro (con la faja y el cintillo que los caracteriza).
El que nos pongan por tamaños sin importar si éramos mujeres u hombres, todos haríamos fuerza para que las personas que suban a la torre estén bien y nosotros igual.
Cuando nos colocaron a todos nos indicaron que debíamos empujar al mismo tiempo y con la mismas ganas sino otros iban a sentir más el peso y esa no era la idea, que ese día SERÍAMOS UN EQUIPO, así no nos conozcamos aún.
Cada equipo logró hacer la primera torre de un piso y al ver eso entre todos nos aplaudimos pues nadie se cayó ni terminó herido como nos advirtieron, pero como contábamos con seguro de salud no importaba.
Luego vino el casteller más grande, donde TODOS formamos parte y logramos los tres pisos, obviamente en el último piso fueron dos integrantes de la colla oficial pues estaban más preparados y queramos o no podían llegar a la cima con mayor facilidad.
¡Fue genial! No les miento, yo ya quería que me pongan el uniforme de esa colla (así les llaman a las escuelas o grupos que entrenan para hacer torres humanas), yo estuve en la base, no me atreví a subir más, me dio miedo, soy humana.
Aparte segundo día y ya haciendo roche (vergüenza). Me tocó en el equipo ser apoyo lateral y de frente, las caras de todos eran de emoción, nadie imaginaba que ese día íbamos a terminar haciendo eso.
Al terminar, el jefe de todos los Masters (que por cierto solo había visto 5 minutos), nos habló y nos preguntó cómo nos habíamos sentido luego de hacer eso, nos animó a trabajar en equipo no solo en las aulas, sino en nuestros trabajos, en nuestras casas, en la vida.
“Si hay que empujar, empujaremos todos y por igual, si hay que apretarnos pues también lo haremos pero juntos, lo lograremos … ¡Bienvenidos a su año de Master!”
#LoAmé #QuiseAbrazarlo
Así empezó mi año en la universidad, creo que ni el soundtrack de Rocky (mi personaje del cine favorito) me hubiera motivado tanto como lo hicieron esos dos días.
Ya voy casi tres semanas de clases y en unos días cumpliré un mes en Barcelona ¿Qué más pasará? Ni idea.
… Ya les iré contando, por lo pronto estoy aprendiendo a lidiar con este frío de otoño, porque recién el frío de verdad empieza en diciembre (Dios Mío Santo), se viene lo bueno pero como diría Gloria Gaynor “I will survive”…


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