
Y tú ¿Para qué escribes?
Ha llegado el momento en el que reconozco y admito que escribir es una de mis mejores medicinas y maneras de incrementar la paz conmigo misma.
Aún cuando al ver a través de la ventana, solo tenga un edificio gris y para variar un cielo color panza de burro, perfecta e imperfecta combinación limeña (Lima, ciudad natal y donde me encuentro actualmente).

Es raro, pero siempre lo he sabido solo que no lo terminaba de aceptar (o escribir) hasta hoy.
Y ya ven, aquí estoy sentada frente a mi pizarra de corcho lleno de post its y fotitos con momentos que al verlos me nutren, escribiendo y recordando a la persona que siempre me dijo: “Cuando escribes, así sea algo chiquito, sé que estás bien” y una vez más, le daré la razón.
Es más, a quién voy a mentir, siempre quiero escribir, me encantaría tener una laptop o app que vaya escribiendo todo lo que me pasa por la mente cuando camino por la calle o saco a pasear a mi perrita o estoy cocinando algo, así con puntos y comas. Sería extraordinario.
Pero creo que eso aún no existe, o ¿sí? Si saben el dato por favor avísenme y si me lo dan como auspicio, mucho mejor (Hay que decretar siempre).
¿Y por qué te gusta escribir?
Es una buena pregunta, es más si algún día me entrevistan me gustaría que la hagan, para poder responder:
Me gusta escribir para desconoctarme y a la vez conectarme conmigo y con mi aquí y ahora, permitiéndome soltar y hacer volar mi imaginación.
¿Y por qué crees que no lo haces tan seguido, aun sabiendo eso?
Otra gran pregunta (recuérdenme pasarle esta lista a mi futura entrevistadora #AySiAySi), para decirle:
Creo que es porque a veces me dejo llevar por lo rápido que pasa la vida o porque una vez más vuelvo a creer que siempre habrá tiempo.
Cuando una de las cosas que más he aprendido este último año y medio es que nada es eterno y toda nuestra vida puede cambiar en solo cuestión de segundos.
Que hoy más que nunca debemos hacer lo que de verdad queremos e ir por lo que nos hace felices (si ya sé, eso puede sonar a cliché, pero es el cliché más cierto y real del mundo), animarnos a adelantar o arriesgar y preguntarnos más veces ¿Por qué no? a solo pensar que ya luego lo haremos.

¿El tiempo? El tiempo es ahora, el mañana aún no existe.
Ojo, con esto no te digo que dejes de planear a mediano o largo plazo eh, solo te invito a empezar a vivir más tus y nuestros sueños desde ahora y no desde mañana.
Así que por eso hoy escribo, para recordarme estas cosas, que las llevo conmigo siempre pero como la vida es loca y avanza no más, a veces las olvido o no las escucho entre tantas cosas, trámites o chamba del día a día.
Tercera pregunta: ¿Seguirás escribiendo?
Sí claro, por eso estoy aquí para conectar, recordar y aflorar mi creatividad. Tengo tantas cosas en la cabeza sobre las qué quiero escribir que debo terminar de ordenarlas o ¿por qué no escribirlas de frente y luego elegir una? Esa idea también me gusta.
¿Y qué vas a escribir?
Aunque me guste y ame el spoiler solo puedo adelantar que deseo escribir y publicar un libro.
¿Cuándo?
Beto, no mentira, este libro será publicado en su momento, ni bien termine de ordenar y escribir todo lo que pasa por mi mente, es decir ya empecé hoy, porque como me decía mi ave fénix “Cuándo escribes, así sea algo chiquito es porque estás bien”.

Y le seguiré dando la razón.
Porque estoy bien viejito, aunque te extrañe todos los días, estoy bien y como me enseñaste, soy un ave fénix que dejaste en este plano listo para siempre volver a volar y escribir (y tomarse una chelita).
Hasta un próximo post, adeu.

